FITXA
=====
Títol: Tom, piel de escarcha
Autor: Sally Prue
Il·lustrador:
Edició: Barcelona: Bambú, 2007
Edat: a partir de 12 anys
Temàtica:
Puntuació: 4 de 4
[També disponible en català: Tom pellfreda]
RESSENYA
========
Tom, piel de escarcha es un libro de fantasía atípico. Si normalmente los libros de fantasía dirigidos a un público juvenil suelen ser excesivamente explicativos, detallistas y con una (muchas veces) innecesaria voluntad de realismo, esta novelita de Sally Prue es todo lo contrario: muy impresionista, nada explícita (tanto, que más que avanzar en la narración, tanteamos, llenos de dudas, lo que está sucediendo), y sobre todo muy simbólica. Algunas de las críticas citadas en la contracubierta la califican de fascinante, original, inquietante, lírica, y por una vez estoy de acuerdo con estas opiniones.
Es difícil explicar en qué consiste Tom, piel de escarcha. Sabemos que Tom es miembro de la Tribu, y sabemos que es joven, pero no su edad exacta. Sabemos que se ha metido en problemas porque debería haber alertado a los otros miembros de la Tribu de la llegada de los demonios (así denominan a las personas), pero no lo ha hecho, y eso es suficiente para que sus congéneres lo busquen y lo maten. Así que solo le queda escapar. Y lo hace, pero no está seguro en ninguna parte: Tom no forma ya parte de nada: ni de la Tribu ni, por supuesto, del mundo de los demonios. Pero será entre estos que encontrará cobijo y, al final, un lugar al que pertenecer.
Dos mundos enfrentados: el mundo de los humanos, con los lazos que unen unos a otros, que para Tom y los suyos supone ser esclavo de los que te rodean; y el mundo mágico del bosque, donde Tom y el resto de criaturas mágicas (aunque poco sabemos de ellas: que pueden hacerse invisibles por alguna especie de conexión con las estrellas, que se alimentan de carne cruda, que son fríos como el hielo) conviven del modo más individualista posible: ni siquiera los padres crean lazos de afecto con sus hijos. Una metáfora sobre las relaciones humanas envuelta en una historia de sentimientos crudos: el miedo, la libertad, el odio, el desconcierto, el amor...